Para desarrollar el Malecón 2000 se ha unido el talento de profesionales de Ecuador, Argentina, Perú e Inglaterra.
TALI SANTOS
Redactora
Las antiguas escaleras que se exhiben en el Malecón 2000 como una reliquia fueron encontradas por la curiosidad de un peruano.
Él es Tito Fernández, el coordinador de la asesoría urbano arquitectónica de la Universidad de Oxford Brookes de Inglaterra para este proyecto y uno de los cinco extranjeros que integran el equipo que maneja esta obra.
Cuando ya se habían iniciado los trabajos de construcción, Fernández vio unas fotos del antiguo malecón y descubrió la existencia de las escaleras.
Pidió al fiscalizador de la obra abrir un hueco donde creía que la foto había sido tomada y ¡sorpresa! ahí estaban.
Él también fue quien recomendó a Oxford para que realice el anteproyecto del nuevo malecón que el banco La Previsora entregó a la municipalidad, cuando daba asesoría a la entidad financiera para la construcción de unas agencias en varias ciudades del país.
De Perú también está Noé Carbajal, asesorando la parte arquitectónica de la obra.
La administración está a cargo de dos argentinos: Pedro Gómez Centurión, quien es el representante legal (gerente general) de la Fundación Malecón 2000 y Guillermo Suaya, el gerente del proyecto.
Stuart Parker, de Inglaterra, es el jefe de los asesores de Oxford, pero solo viene a Guayaquil cada dos meses.
Junto a los de Oxford Brookes y los administradores argentinos está el equipo ecuatoriano. “Todos los arquitectos que ejecutamos las ideas de Oxford somos de Ecuador”, dice Patricia Alarcón, una de las coordinadoras que se involucró con el proyecto por la convocatoria que salió en la prensa en 1997, para reclutar personal técnico con este propósito.
“Oxford hizo la selección y me tocó entrevistar como a 650 postulantes. Actualmente trabajan 12 arquitectos, todos ecuatorianos”, dice Fernández.
La ingeniería civil está a cargo del ecuatoriano Roberto Espíndola y bajo su responsabilidad tiene toda la estructura del Malecón.
“La cimentación del área que se le gana al río, desde el punto de vista de la construcción y de diseño, es la parte más complicada”, refiere.
En el proyecto Malecón 2000 hay representantes de varias provincias del país. Hay gente de Esmeraldas, Milagro o Jipijapa, que en feriados, al igual que algunos de los extranjeros, aprovechan para ir a sus lugares de origen.
La tarea de restauración, como la que se hizo en el Reloj Público o la que se ejecuta en el Mercado Sur, ha sido encomendada a un equipo de quiteños que trabajó en la reconstrucción de la Compañía de Jesús, en la capital, y en el Parque Histórico.
Hasta mediados del 2001
Convocado a trabajar ad honorem (gratuitamente) en la administración del proyecto, por el ex alcalde León Febres-Cordero, Pedro Gómez Centurión tiene la responsabilidad de toda la obra.
Para él lo más delicado ha sido administrar los fondos de los contribuyentes y ahora debe cumplir el reto de la Fundación de entregar a Guayaquil las otras cuatro etapas, como máximo, a mediados del próximo año.
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